El proceso de laminado en frío sirve para impresiones de gran calidad en imagen, con un tiempo de vida más prolongado, protección contra los rayos UV en sustratos colocados al aire libre; la laminadora en frío se puede utilizar para el adhesivado de imágenes sobre materiales de soporte como cartón, PVC, estireno, coroplast, etc, por lo que tiene múltiples aplicaciones para las empresas.
Es posible utilizar la técnica de laminado en frío en una o ambas caras de un material e incluso encapsularlo; el encapsulado se realiza en cualquier tipo de material, siempre que no rebase el espesor de altura de los rodillos que emplea la maquinaria, usualmente se realiza en papel, cartón, cartulina, acrílico o vinil impreso. Usualmente se utiliza una película para realizar el laminado, esta película viene en presentaciones mate, brillante, satín o texturizado, dependiendo del material a laminar, será la película a utilizar.
Los equipos suelen soportar hasta 150 metros lineales de película para el laminado.
El laminado en frío se utiliza especialmente en la industria de la fotografía, aunque también es utilizado en la fabricación de paneles publicitarios en los que no se puede utilizar el vidrio. El resultado es un tipo de cuadro plastificado, protegido de los agentes atmosféricos que suelen dañar a la publicidad que se encuentra en el exterior.
